La Agencia Negociadora del Alquiler (ANA) ha mostrado su preocupación ante el retraso en el establecimiento del nuevo índice de actualización de los precios del alquiler de vivienda, que está provocando una gran inseguridad jurídica y malestar en el sector.
Según la Ley 12 / 2023 de la vivienda, el gobierno está obligado a crear un nuevo índice de referencia de actualización de rentas que regule los contratos de arrendamiento a partir de 2024 y que sustituya al IPC y a los topes en los precios de 2023 y 2024. El Instituto Nacional de Estadística (INE) debe crear el índice del alquiler de la vivienda pero a falta de cuatro meses para el plazo que dicta la Ley aún no se ha creado el nuevo índice.
La ANA, respecto al índice, manifestaba que “todavía no se ha creado, lo que está provocando una inseguridad importante que genera inquietud”, e insistía en que“en todos los arrendamientos de viviendas que se han firmado en lo que va de año, ni arrendadores ni arrendatarios han podido conocer con anticipación si sus actualizaciones anuales de rentas iban a tener limitaciones o con qué índice se iban a actualizar. Y esto ocurre porque los actuales límites del 3% que se están aplicando en este 2024 dejan de estar en vigor en 2025”.
Una clara consecuencia de este retraso es que los propietarios e inversores optan por otras alternativas al alquiler de viviendas que permitan anticipar las condiciones de sus apuestas económicas y como apunta la ANA “poder hacer análisis financieros completos y calcular la rentabilidad de sus inversiones“.
Concluye la agencia destacando que el gobierno debería tener “más anticipación, trabajo y capacidad normativa para evitar problemas que ya sabían iban a surgir desde finales del 2023″; y así, “evitar el actual déficit que está afectando a la oferta del alquiler de viviendas por la inseguridad existente”.
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