Ya hemos hablado previamente sobre este asunto del alquiler turístico en otros artículos como El auge de las viviendas turísticas provoca el aumento del precio del alquiler en Barcelona o Ya tenemos aquí la nueva ley de pisos turísticos del País Vasco.
Lo cierto es que se trata de un tema que sigue generando cierta polémica, ya que parece que las Comunidades Autónomas, encargadas cada una de aplicar la normativa de este tipo de alquiler de forma independiente, no han sido capaces de responder a los cambios surgidos en muchos modelos de negocio en los últimos años debido, sobre todo, a Internet. El resultado ha terminado siendo confuso ya que, según en la comunidad que estemos, se permite o no el alquiler de un inmueble para vacaciones. Algunas de las normativas aprobadas por las comunidades han terminado fracasando o han estado sujetas a cambios constantes.
Además, el gusto general por el tipo de alojamiento ha cambiado y gracias a Internet los usuarios encuentran múltiples opciones acompañadas de imágenes y opiniones. A esto tenemos que sumarle que el alquiler se ha convertido en una opción más de inversión, como veíamos en este otro artículo, y los propietarios, a raíz de la crisis, han visto el alquiler de sus inmuebles como una alternativa de generar ingresos. Esta situación ha desembocado en una fuerte competencia hacia el sector hotelero y al de alquiler de apartamentos.
Esta situación derivada de los cambios en el mercado y en la economía han llevado a la iniciativa de regular el alquiler para uso turístico, pero todavía hay algunas lagunas.
Esperemos que se terminen encontrando soluciones justas para todas las partes.
